Éste es un blog, como cualquier otro, pero con algunas particularidades. Es una idea que vengo cocinando hace tiempo, producto de mis ganas y prácticas de escribir sobre todo y nada, pero cuya materialización me resultó coherente recién a partir de la aparición de Colección Ecléctica, espacio virtual del gran Pablo A. Marzocca. ¿Por qué? Como su nombre lo indica, y como su introducción lo declara, aquel "es un blog que dudosamente tendría un tema unificador, un blog que bien podría llamarse 'cambalache' o 'Boca Juniors'", cuyo autor se nos presenta como "Una colección de intereses que revolverían el estómago al mejor preparado, una combinación de intelectualoide con nerd, geek y futbolero, un verdadero desastre sociológico, producto probablemente de algún arma biológica perdida o de un entorno social comprometido"; aquí ocurre, más o menos, lo mismo.
Habiéndome inspirado en Pablo para el formato y los contenidos de los escritos que aquí se verán, me pareció que lo mínimo que podía hacer (además de citarlo y linkearlo, claro) era ponerle a este blog un nombre lo suficientemente distinto como para que no suene a plagio. Con eso en mente, en búsqueda de algo tan apropiado como lo suyo, vino a mí el recuerdo de la querida Sol Silber y uno de sus tantos proyectos web: putos(e)snobs. ¿Suena parecido? Entenderán, espero (y espero, sobre todo, entienda ella), que esto no es tanto un asalto a mano armada (como parece) sino más bien una suerte de homenaje a ese sitio que tantas carcajadas me produjo, lamentablemente desaparecido. La parte buena, claro, es que con cada cierre ella encuentra el surgimiento de algo nuevo, se topa con la incansable obstinación y tenacidad de sus dedos para repiquetear sobre el teclado, y entonces hoy la podemos encontrar en ¡Dejá Vivir Puta!
¿Y qué es lo que hace que puto(e)snob sea un nombre apropiado para este blog? Si se me conoce, no es muy difícil descubrirlo. A mí, en cambio, me costó bastante tiempo: no sé bien ni cuándo ni cómo fue que terminé del otro lado, siendo uno más de todos esos forros hijos de puta a los que me cansé de criticar, de frente y a sus espaldas, sacarles el cuero hasta dejarlos en carne viva para después comérmelos crudos, esnobs de mierda... y, carajo, de repente, yo también. Luego del reconocimiento, entonces, la evidencia concreta: será mi snobbismo el origen del contenido de este blog. Desde ya, les pido perdón.